lunes, 20 de septiembre de 2010

Leamos juntos el relato


En otras palabras podríamos decir...

“Los israelitas salieron del monte Hor por la ruta del Mar Rojo, bordeando el territorio de Edom. En el camino se impacientaron y comenzaron a hablar contra Dios y contra Moisés:
—¿Para qué nos trajeron ustedes de Egipto a morir en este desierto? ¡Aquí no hay pan ni agua! ¡Ya estamos hartos de esta pésima comida!
Por eso el SEÑOR mandó contra ellos serpientes venenosas, para que los mordieran, y muchos israelitas murieron. El pueblo se acercó entonces a Moisés, y le dijo:
—Hemos pecado al hablar contra el SEÑOR y contra ti. Ruégale al SEÑOR que nos quite esas serpientes.
Moisés intercedió por el pueblo, y el SEÑOR le dijo:
—Hazte una serpiente, y ponla en un asta. Todos los que sean mordidos y la miren, vivirán.
Moisés hizo una serpiente de bronce y la puso en un asta. Los que eran mordidos, miraban a la serpiente de bronce y vivían”.
Un evento muy recordado que sin dudas debe ser estudiado a fin de descubrir las conexiones existentes entre la serpiente, el Redentor y los simbolismos dentro de las culturas vecinas al pueblo de Israel.
Veremos como avanzan las investigaciones con respecto a este tema...

No hay comentarios: